Domar a potros

Domar a potros:


 A los caballos les gusta estar con personas, una vez han comprendido nuestras intenciones y comprueban que somos sus amigos. 

Hay que tener en cuenta que el caballo es un animal de huída y que en principio en su estado salvaje ve al hombre como un depredador más, como un enemigo, no nos conoce y por eso huye de nosotros, pero depende de nosotros el que nos acepte como amigo o no.

Una vez superado todo esto, les encanta estar con personas y se pueden crear vínculos muy especiales.


El momento de iniciar la doma de un caballo: Hay gente que deja el caballo a su aire en un prado por ejemplo hasta que tiene la edad y entonces empieza con su doma, y hay otros que desde que nace empiezan a vincularlo con el hombre.

Lo principal son las aptitudes que tiene cada animal para cada disciplina ya que todos los caballos no valen para todo, si lo pueden hacer pero no serán campeones.

También depende de nosotros, por ejemplo si sólo lo hacemos para nuestro disfrute o si por el contrario no queremos dedicar a la competición y que remos llegar lo mas lejos posible dentro de la competición.

Para disfrutar nos vale cualquier caballo.

Si pretendemos llegar a lo mas alto posible, no nos vale cualquier caballo tienes que ser uno que tenga las condiciones necesarias tanto por su carácter, por su físico y por su entrenamiento para poder ser un gran atleta y llegar con su jinete a lo mas alto.